¿Cuáles son los objetivos clave de la Nueva Ley de Residuos para una Economía Circular?
Hablamos con Francisco J. Iglesias CEO de Ziclos Circular Economy sobre la nueva Ley de residuos.
La propia Ley especifica como objetivos principales los de reducir los efectos negativos de la generación de los residuos y sentar los principios de la Economía Circular, de tal forma que se pueda luchar contra el cambio climático y proteger el medio marino, así como contribuir a la creación de empleo.
La nueva Ley 7/2022 obliga a los Ayuntamientos a recoger de forma separada diversos residuos en los próximos años: biorresiduos, aceites de cocina usados, textiles, pilas, electrodomésticos y muebles, entre otros.
Son estas fracciones de residuos lo suficientemente polémicas o contaminantes como para implementar cambios en un plazo tan corto de tiempo?. Es evidente que los ayuntamientos tienen que “ponerse las pilas” para llevar a cabo todas las exigencias de la nueva Ley en un plazo tan corto de tiempo. Por poner un ejemplo, se impone la recogida de biorresiduos antes del 30 de junio (pasado mañana) a las entidades locales con más de 5000 habitantes o la recogida selectiva de residuos textiles y domésticos peligrosos antes del 31 de diciembre de 2024 a todas las entidades locales. Está claro, además, que ello también exigirá a determinados sectores la implantación de los modelos de “responsabilidad ampliada del productor” en un tiempo récord. Contestando a la pregunta, en mi opinión, no es tanto un problema de residuos muy contaminantes, sino de residuos que perjudican el reciclaje de otros residuos porque están mezclados. La Unión Europea ya nos ha “tirado de las orejas” por los índices de reciclaje tan bajos de España y es necesario adoptar medidas “a toda prisa”.
¿Qué medidas impone la ley respecto a los plásticos de un solo uso?
El objetivo más importante es la reducción de este tipo de plásticos en peso en un 50% para 2026 y de un 70% en 2030 con respecto a lo que se ha comercializado en 2022. Para conseguir estos objetivos, la principal medida es la implantación de un impuesto a todos estos plásticos y la prohibición de algunos de ellos, tales como los bastoncillos de algodón, los cubiertos, los platos de plástico, las pajitas y otros. Asimismo se establecen requisitos de diseño para recipientes de plástico de bebidas y la recogida separada de las botellas de plástico con unos determinados plazos.
¿Qué beneficios medioambientales supone el fin de condición de residuo que regula el artículo 5 de la ley?
Pues la verdad es que no acabo de ver los beneficios medioambientales que supone el fin de condición de residuo, tal y como está expresado en la Ley. En primer lugar, se exigen unas condiciones que son cumplidas por casi todos los residuos que se reciclan, por lo que se “abre la veda” a relajar el control sobre los residuos. Por otro lado, se indica que, reglamentariamente, por parte del Ministerio, “se pueden establecer criterios específicos”, pero no lo indica como algo obligatorio. Asimismo, indica que pueden ser las propias CCAA las que establezcan los criterios, de tal forma que lo que puede ser residuo en una comunidad puede no serlo en la de al lado. En fin, muy poca claridad sobre algo que debería ser totalmente transparente.